miércoles, 3 de julio de 2019

Palacio de las Ursulinas





El Palacio de las Ursulinas llama la atención de los transeúntes por su estilo arquitectónico morisco. Su arquitectura elegante e inusitada en La Habana nos hace sentir admiración, al tiempo que nos entristece el estado en ruinas del edificio. Construido por el ingeniero José Toraya, adepto del estilo neomudéjar que proyectó en la fachada de esta edificación los elementos más representativos de la Mezquita de Córdoba: combinando los arcos de herradura con otros polilobulados. 

El Palacio está ubicado en la Plazuela de las Ursulinas, situada en Egido entre las calles Muralla y Sol, dentro de la antigua Muralla de Mar que protegía la ciudad. Siendo parte del casco histórico de la Habana Vieja, declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 1982. La Plazuela dela Ursulinas obtiene su nombre de las monjas ursulinas que en 1804, procedentes de la Luisiana, se instalaron en el edificio de las Recogidas en la extremidad occidental de la calle Sol, donde además de constituir convento oficiaban en una sencilla iglesia de una sola nave y se dedicaban a la educación femenina.

Actualmente el Palacio de las Ursulinas es un edificio de viviendas familiares, donde el deterioro de la construcción por la escasez de mantenimiento durante más de medio siglo es notable. Sin embargo no parece estar próxima su restauración, y continuando su lamentable destrucción en el tiempo.
Base de las columnas de la fachada
Las evidencias del deterioro son diversas, las bases de las columnas de la fachada están degradadas y en la pared lateral aparecen grietas. Además, las paredes no pueden recordar la última vez que fueron pintadas y los azulejos de la escalera principal han ido desapareciendo. 

Los residentes de La Habana se han acostumbrado a observar destrucción y abandono en cada parte de la ciudad. Considerando que no tiene sentido reclamar si no serán escuchados, mientras que las edificaciones piden a voces ser salvadas con cada nueva grieta que aparece.

Puede ver más imágenes en el siguiente enlace Imágenes del Palacio de las Ursulinas.

jueves, 27 de junio de 2019

Baches en la Vía Blanca


La aparición de nuevos baches o huecos en la Vía Blanca es simplemente alarmante. La Vía Blanca es una de las carreteras más importantes de Cuba, pues conecta La Habana con la ciudad de Matanzas y la ciudad turística de Varadero. Por esta razón es una de las vías más transitadas del país y con un mayor grado de atención que el resto de las carreteras de Cuba. Por todos los cubanos es conocido el mal estado de las carreteras cubanas. Sin embargo, ciertas avenidas y calles de primera importancia se mantienen un buen estado. Dígase Quinta Avenida, Malecón, 23, Vía Blanca entre otras carreteras de La Habana. Pero esto ha cambiado en la Vía Blanca

Bache en la Vía Blanca

La Vía Blanca ha sufrido rápidamente los efectos de las nuevas obras hidráulicas realizadas en el segundo trimestre del 2019. Con el objeto de instalar una nueva conductora de agua se realizaron excavaciones de 1,5 m de ancho y 2 m de profundidad en una de las sendas de la vía. Las obras se realizaron en un tiempo corto, pero desafortunadamente han surgido hundimientos en poco tiempo también. En menos de un mes, dos enormes baches han aparecido en el origen de la conductora cerca de la intersección de Palatino y Vía Blanca. Los baches abarcan casi todo el ancho del zanjeado y alcanzan los 20 cm de profundidad. Representando un peligro potencial, tanto así que se  han colocado barreras con señales que previenen a los conductores.

La nueva conductora va soterrada en las carreteras, recorriendo la Vía Blanca desde la calle Suzarte hasta 10 de Octubre. La misma suministrará el líquido necesario en la Habana Vieja a los nuevos hoteles y a los cruceros que entran a la bahía de La Habana. El proyecto está directamente vinculado a los servicios de turismo, una de las principales esferas comerciales de Cuba. Por lo que pudiera pensarse que se tomaría que mayor seriedad. Ciertamente, es difícil comprender como una carretera se ha mantenido funcionando durante de 60 años, y las nuevas obras realizadas no han aguantado un mes. El mal trabajo de compactación realizado debe de ser significativo. Cabe suponer que ello afecte la tubería de polietileno, pudiendo ocasionar salideros. Lo cierto es que la calle se ha hundido antes de entrar en servicio la nueva conductora y más problemas pueden estar por venir.



Palacio de las Ursulinas

El Palacio de las Ursulinas llama la atención de los transeúntes por su estilo arquitectónico morisco. Su arquitectura elegan...